Conocida como una de las cocinas más deliciosas de México, la gastronomía de San Luis Potosí guarda el sabor de la región huasteca en sus decenas de platillos. Parte de su enormidad culinaria se basa en influencias de la cocina española. Asimismo el sazón regional viene a darle el toque local. Su variedad es grande y esta delicadamente sustentada por vegetales, maíz y carne. La variedad de sus aromas recogen la tradición indígena de sus tantas regiones. San Luis Potosí se saborea con una cuchara grande de apetito y entusiasmo.
Asado de Boda
Casarse ya no tendrá que ser necesario para probar este manjar de la zona arida de San Luis Potosí. Su origen se remonta al siglo XVIII, tradicional para los festejos de la región. El platillo consiste en trozos de cerdo fritos en manteca y bañados en una salsa de chiles rojos especiada con orégano.

Zacahuil
El platillo emblema de la huasteca mexicana. La importancia de su consumo recae en la vida misma de los habitantes potosinos debido a su arraigo de años. Puede llegar a medir hasta dos metros. Está elaborado con masa de maíz quebrado, relleno de carne de puerco y cocido en un horno de leña.

Enchiladas Potosinas
Representan la cocina característica de la zona centro de San Luis Potosí. Son una especie de empanadas rellenas con queso. Sus variaciones se presentan en otras partes del estado como las enchiladas rioverdenses, rellenas con papas, sazonadas con salsa y acompañadas con patitas de cerdo. Asimismo las enchiladas huastecas se componen por tortillas rellenas de huevo o queso y bañadas en salsa de diversos ingredientes.

Fiambre Potosino
La botana por excelencia de la comida potosina. El Fiambre se presenta en un gran platón compuesto por patitas de cerdo, pollo y lengua de ternera o res. En tanto las verduras más utilizadas son la zanahoria, papa y calabacita mezclados con una vinagreta. Este platillo representa la variedad de la gastronomía de San Luis Potosí.

Queso de Tuna
Elaborada en la zona nopalera de San Luis Potosí, el queso de tuna se elabora de forma artesanal. Se fabrica sólo con el jugo de la tuna roja. Es cocinado en grandes ollas por 10 horas hasta que se espese lo suficiente. Su sabor es singularmente dulce y jugoso.

Foto de portada: Directo al Paladar México
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